Se agarran al autoengaño para gritar a los cuatro vientos que el amor no es importante. Lo único que ocurre, es que están completamente solos...Y, ¿quién no daría todo lo que fuera por tener un par de hombros que les sujeten cuando perdemos el equilibrio y que les impulsen a afrontar los problemas?
Quien tanto oculta, nada bueno esconde...
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